No dejan de impresionarme las sorpresas de la Naturaleza que va desvelando la Ciencia.
Y algunas, aunque ya sabidas, me sorprenden cada vez que las vuelvo a recordar porque alguien me lo dice, porque lo leo en algún sitio o porque lo veo de nuevo en un documental.
Una de esas cosas sorprendentes es la que he leído hoy en un libro: todos los seres vivos de la Tierra, desde las más pequeñas bacterias hasta los más complejos vertebrados superiores, incluido el ser humano, ESTAMOS HECHOS DE LOS MISMOS VEINTE TIPOS DE LADRILLOS, es decir, de los mismos veinte aminoácidos, aunque la cifra de aminoácidos distintos posibles es de millones, por no decir infinitos. Es una cuestión de combinatoria y las combinaciones posibles, descartadas algunas por obviamente inconvenientes, es de miles y hasta millones. Pero la Naturaleza se ha conformado con sólo VEINTE de esas moléculas que llamamos "aminoácidos". ¿A qué se debe esto?
(A modo de símil, supongamos una ciudad inmensa, como Tokio, donde todas la casas, calles, fuentes, puentes, el metro, etc. estuviera toda ella hecha con sólo 20 tipos de piezas de construcción: ladrillos, losetas, baldosas, tejas, bloques, etc. pero entre todas ellas no habría más de 20 modelos. ¿No sería sorprendente que los habitantes o los arquitectos no hubieran buscado nuevos tipos de elementos constructivos y se hubieran conformado durante millones de años con usar los mismos 20 elementos?)
A la luz de la razón, que es la única luz bajo la que se mueve la Ciencia, esto tiene un significado claro: todos los seres vivos actuales procedemos de un ancestro común, el cual ya contaba con esos únicos 20 aminoácidos distintos como ladrillos que formaban su ser.
Leo en el libro "Las 1.001 cosas que todo el mundo debería saber sobre la Ciencia", de James Trefil (RBA Editores S.A., 1993):
Todas las proteínas en los sistemas vivos de la Tierra están compuestas por sólo veinte aminoácidos distintos. Cada proteína que aparece en cualquier sistema vivo de nuestro planeta está formada por diferentes combinaciones de los mismos veinte aminoácidos básicos, pese al hecho de que pueden fabricarse muchos más tipos de aminoácidos en el laboratorio. Los nombres de los veinte básicos son:
glicina, alanina, valina, leucina, isoleucina, serina, treonina, ácido aspártico, ácido glutámico, lisina, arginina, asparagina, glutamina, cisteína, metionina, fenilalanina, tirosina, triptófano, histidina y prolina.
¿Por qué esos veinte aminoácidos? Hay dos escuelas de pensamiento. Una sostiene que es esencialmente accidental, que la primera célula se formó con esos veinte aminoácidos, y a que apartir de ahí la vida y en consecuencia todos sus desarrollos tuvieron los mismos veinte aminoácidos. Llamamos a esto la escuela de pensamiento del "accidente congelado". La otra escuela de pensamiento sostiene que existe alguna ley, aún desconocida, que hace que esos veinte aminoácidos en particular sean la combinación óptima para los sistemas vivos. Podemos llamar a ésta la escuela de la "ley bioquímica". Por el momento, yo personalmente me inclino hacia el punto de vista del "accidente congelado", pero no me sorprendería si sus oponentes demostraran tener razón.
¿No es maravilloso?
Es como, si en cierto modo, todos los seres vivos sobre la Tierra fuéramos primos unos de otros, en mayor o menor grado de parentesco, pero parientes de todas formas. (Hoy contemplaba unas hierbas que se han hecho altas junto al sitio donde trabajo y pensaba: "esas plantas tienen un antepasado común conmigo". De alguna forma me hacía sentir más cariño hacia ellas, sintiéndolas casi como de la familia, y no es broma).
En un intento (osado por mi parte) de responder al misterio, a mí se me ocurren varias posibilidades, aunque reconozco que todas ellas cabrían dentro de una de esas dos escuelas de pensamiento.
1º) Que el origen de la vida en la Tierra tenga origen extraterrestre. No es una idea original mía, claro. Y esto no quiere decir que hayan venido alienígenas a sembrar la vida hace unos miles de millones de años (o tal vez sí), sino que muy bien pudieron ser "protocélulas" formadas en algún asteroide de los millones que bombardearon la Tierra desde su formación. Esas protocélulas dispondrían de pocos aminoácidos en su sustrato rocoso (aquello no sería una sopa rica en todo tipo de moléculas) y esto pudo hacer que el origen de la vida estuviera basado en un puñado de esos aminoácidos.
Al alcanzar nuestro planeta y caer en la "sopa primordial" que eran los mares de esa Tierra recién formada y todavía en acreción, mares ricos en moléculas de todo tipo y, por supuesto, casi todas orgánicas, pudieron reproducirse a placer, pero manteniendo el limitado conjunto de esos 20 aminoácidos que ya constituían la base de su estructura vital.
Esta teoría estaría dentro del "accidente congelado" y, por supuesto, tiene muchos flecos.
2º) Que los aminoácidos "elegidos" representen un estadio de energía muy bajo, siendo sabido que la Naturaleza tiene predilección por los estados de mínima energía, para quedarse allí instalada cuando los encuentra. Esto pudo ocurrir en los orígenes (la "sopa primordial") de modo que ese sistema de 20 aminoácidos era lo suficientemente estable como para no aparecer otro u otros que pudieran hacerle competencia.
Una ramificación de esto es que pudo haber varios conjuntos de aminoácidos en el origen de la vida pero, por selección natural, proliferó y finalmente dominó y perduró el más adaptado o adaptable (el de los 20 que conocemos), expulsando a los otros del tablero de juego que es la vida en la Tierra. Al desaparecer en estadios muy primordiales de la vida en la Tierra, la existencia de esos otros conjuntos de aminoácidos sería muy difícil de probar ahora al ser igualmente difícil encontrar hoy día restos de esos sistemas (probablemente no más complejos que amebas o bacterias).
Estaríamos dentro de la escuela de "ley bioquímica".
(Un caso parecido es el de la Humanidad que conocemos, que ha quedado como única representante del género Homo, aunque sabemos por fósiles que ha habido varias otras especies Homo, algunas desaparecidas tan sólo hace 30-35.000 años, como es el caso de los neanderthales. Todas han desaparecido por causas de momento desconocidas, pero muy bien pudo tener algo o mucho que ver el propio género Homo sapiens en su eliminación).
En todo caso, es un apasionante rincón de la Ciencia que nos permite elucubrar sobre qué misterios encierra, sin necesidad de llegar a caer en esoterismos, a los que tan dados son las personas con poca o mediocre formación en Ciencia.
Si tienes alguna teoría (seria) más de porqué han llegado a ser esos 20 aminoácidos y no otros, estaría bien que lo dejaras apuntado en los comentarios para que los demás reflexionemos sobre qué parte de verdad puede contener.